Un campanario altísimo nos anuncia desde lejos que nos aproximamos a la maravillosa iglesia.
Afrescos del siglo XIV nos narran historias del Apocalipsis y del paraíso, y sobrios salones nos hacen revivir la vida cotidiana de abates y santos.
Nos referimos a la célebre Abadía de Pomposa fundada en el siglo VII por monges benedictinos quienes se establecieron en la que fue una isla situada entre dos afluentes del Río Po.
En la Edad Media Pomposa llegó a ser una de las abadías más prosperosas y potentes del norte del país. Fue muy frecuentada por nobles, peregrinos y personajes ilustres como lo fue el monge Guido D'Arezzo inventor del pentagrama musical.
En este recorrido les revelaremos detalles de la extraordinaria temporada dorada del gran complejo monástico y les conduciremos al interno de la abadía con sus maravillosos pisos de mármol y frescos de inspiración giottesca. También tendremos la oportunidad de visitar el Refertorio y el Salón Capitular.
Al términe de este recorrido místico nos sentiremos sorprendidos y emocionados.